Producto del amor por la literatura de ciertas personas, existe una sustancial cantidad de pequeñas editoriales que publican libros en formatos particularmente artesanales. Minúscula es una editorial barcelonesa que publica libros en pequeño formato.
Llegué a éste por pura curiosidad al buscar historias sobre padres e hijos, tras leer Tiempo de vida. Luego, como casi siempre, me encontré con algún blog amigo que ya había pasado por él. Se trata de una novela de menos de 100 páginas publicada en un formato no mucho más grande que una caja de CD. Viene presentada de una presentación y de un posfacio. La historia es mínima en su planteamiento: un padre gravemente enfermo pide a un hijo que lo acompañe a una posible última visita a la isla donde el hijo creció.
Y no hay gran cosa más: la coexistencia normal, el fantasma de la enfermedad y su fatal destino planeando sobre escenas y recuerdos. Los ratos pasados en común, y algún otro detalle que, en mi opinión, dan lo justito para considerar ésto una novela y no un mero relato corto algo completado. Donde Tiempo de vida abarcaba dos vidas con sus períodos en paralelo, no hay información (o yo no la he captado) ni del momento de la acción, ni de la esposa o madre. De la vida de los personajes. Ataúdes hechos a mano, de Capote, relato acurrucado entre la suntuosidad de Música para camaleones, emplea las mismas páginas sacando muchísimo más provecho. El coronel no tiene quien le escriba, de García Márquez, dibuja casi toda una sociedad en parecido número de páginas. Hasta encuentro más sustancia y más visceralidad en un ejercicio fallidamente transgresor como Sukkwan island, que no colmó ni con mucho las expectativas planteadas.
Una hora, no demasiado tiempo como para arrepentirse. Al menos, eso.
¿se puede hacer una analogía con el tiempo? En noventa minutos se puede asistir a un espectáculo vibrante y bello o a una sucesión de minutos infumables. Todo esto para felicitarte por llegar a las semis.
ResponElimina¡Abrazo!
Igual he sido cruel con el libro. Pero esa elegía de la enfermedad y el viaje de despedida me ha parecido excesivamente sencilla como planteamiento para una novela.
EliminaRespecto a "lo otro". Qué regalo la emoción de dos partidos de semifinales : de dos martes o dos miércoles de fútbol al máximo nivel.