Justo me entero que en L'Hospitalet hay estos días un salón del manga y el ánime ( y supongo que su versión porno el hentai ). La publicidad subliminal, no decían que estaba prohibida ??. Puede que dos posts sobre el Japón puedan parecerle un exceso a alguno pero la inspiración tiene esos extraños giros.
El turista accidental era una película sobre un escritor ( creo que el protagonista era William Hurt y no sé si también salía Geena Davies la de Thelma y Louise ) dedicado a escribir libros de viajes sin haber pisado los países de los que hablaba. Recuerdo eso y poco más : supongo que la historia se empezaba a ir hacia el tema de que era un tío raro y acomplejado y Geena Davies debía hacer algo para sacarle de esa extraña situación. Retener eso sólo, aparte de revelar el tiempo que hace que la ví, debería decir algo a su favor. Sí : hay películas ( y discos, y libros, y amistades, y tardes y noches de nuestra vida ) que no nos dejan ninguna huella en absoluto. En este sentido, los guionistas de la película algo, aunque fuese ese personaje, hicieron que trascendiera.
Japón crea hasta figuras que creemos que son exclusivas de ese lugar ( diría el engolado, "recóndito lugar" ) del planeta. Los hikikomori son personas que se han retirado voluntariamente de la sociedad. A veces son gente muy joven. Se encierran en su casa, supongo que aún más concretamente en su habitación, y de ahí no salen. Bueno, aquí les llamaríamos de alguna manera parecida a "ermitaños", quizás "anacoretas". La verdad es que me imagino que los hikikomori (todo parece más cool dicho en japonés ), a pesar de esa reclusión, y más allí, deben conservar su ADSL, su acceso, su Facebook o su Twitter, y deben ir haciendo su informe de qué tal les va la reclusión. Pijama limpito, cama hecha por mamá, supongo que la leche con galletas para pasar la tardecita, y venga informar al mundo de lo cruel que ha sido su entorno con ellos para que hayan acabado así. Eso chicos es trampa, las ventanas del mundo siguen abiertas y la luz se cuela por ellas. Así que he perdido la esperanza de encontrarme con un hikikomori. Si anda por la calle es que ya ha dejado de serlo. Procuro evitar a los traidores. Y a los impostores.
A costa de defraudar expectativas diré que lo único que tenía previsto para las palabras bonsai, karaoke, hara-kiri y sushi era mencionarlas, y ya lo he hecho.
A costa de defraudar expectativas diré que lo único que tenía previsto para las palabras bonsai, karaoke, hara-kiri y sushi era mencionarlas, y ya lo he hecho.
Si tuviese que inclinarme por algo que me evoca completamente Japón sería esta canción.
Ryuichi Sakamoto ( el oficial japonés joven ) era uno de los miembros de la Yellow Magic Orchestra, grupo electrónico de gran influencia en toda la escena de Detroit de los últimos 80 que acabó con la inclusión del techno y el acid house. Aparte de protagonizar la película compuso parte de su banda sonora.
A quien me diga que no sabe quién es David Bowie ( el oficial británico no tan joven de pupilas de diferente color tal como mencioné en mi post Thought he was James Dean for a day ) le podría preguntar muy irónicamente en qué parte de la Amazonia profunda ha residido durante los últimos 40 años, o dejarme de ironías y decirle que si tan poco le interesa la música que no sé que hace aquí. No recuerdo que mencione Japón en ninguna de sus canciones, pero obtuvo un gran éxito versioneando a Iggy Pop en China girl.
Y quien canta en esta soberbia canción, que declaro aquí y ahora que, para mí, es una de las 50 mejores de la historia, es David Sylvian. Es muy injusto que no haya hablado de David Sylvian hasta ahora. Tanto como líder de Japan, que, a pesar de su nombre, nunca grabaron ningún disco en Japón, como por su arriesgada y fructífera carrera en solitario. Lo más que Japan se acercaron a Oriente fue grabando Visions of China. La influencia fue constante en su obra. David Sylvian ( veáse sino la imagen ) llevaba una pinta muy ambigua, que acabó inspirando a grupos como Duran Duran. Parecía muy amanerado , está claro que se pasaba empalideciendo su cara, y ese pelo es so eighties, pero contra todo pronóstico acabó casándose con una guapa cantante llamada Ingrid Chávez. Las pintas de los Japan tenían una inspiración clara en The New York Dolls. Su música bebió de varias fuentes : Satie, el glam-rock, Bowie, Roxy Music, cierta música concreta. El grupo se disolvió por diferencias creativas en la absoluta cúspide de su carrera y su potencial creativo. Aún así, poca gente les llegó a conocer por aquí. Nocturnos, experimentales, oscuros, algo turbios, si un día hubiese que echar cuentas habría que ver cuánta música no hubiese existido de no ser por su influencia. ( De hecho, si hiciésemos el mismo ejercicio sobre el grupo alemán Kraftwerk puedo asegurar que mi primera confesión es que este blog no existiría de no haberlo hecho Kraftwerk ).
Hace unos meses, un antiguo jugador del Madrid ( no podía ser de otro modo ), el italiano Antonio Cassano, confesaba, al presentar un libro ( su primer libro ) dónde narraba su vida y las muchas mozas que había conocido, que ya había escrito más libros en su vida de los que había leído. Más que confesarlo parecía alardear de ello. Vaya tela, muchacho. Yo debo admitir que, desde que ando líado con ésto, no consigo reunir el tiempo suficiente para leer un libro como Dios manda. Y mira que he llegado a comprar en estos meses, que se acumulan pacientemente ( los libros son amigos llenos de paciencia ) sobre mesitas o estantes, esperando su día. Ya hablé un poco acerca de mi ilusión por el blog : siempre he sido más de hacer regalos que de recibirlos; por lo tanto sacrifico a gusto no poder disfrutar con el ocio entrante porque ando líado con el ocio saliente. Mañana puede que volvamos a Europa.
F, tengo que decirte que me ha gustado mucho el post sobre Japón. Ya sabes que es una de mis perdiciones; adoro el sushi, el anime,las trufas de te verde,el sake tibio, todo lo que tenga que ver con la cultura lolitesca y a un juego llamado Puyo Puyo (algo parecido al Tetris pero con caritas:P) Por eso algún día se que iré y no creo que me defraude.
ResponEliminaA mucha gente no le gustó Lost in Translation, porque ver un film en el que poco se habla y poco se detalla, y que eso es precisamente lo que el espectador tiene que pensar, pues parece ser que da pereza. Pues eso es precisamente lo que me gustó de la peli; primero la vida de los personajes, la ciudad de Tokyo, el sonido, el choque de la cultura oriental frente a la occidental. Tal vez es un pelín lenta pero se lo perdono por ser la Coppola. Por cierto creo que te he recomendado a la enésima potencia Maria Antonieta, sé que la banda sonora te gustará. Ah! x cierto, gracias de nuevo por el libro..todo un detalle!saludos!!