Voy a aclarar antes que nada que seguramente voy a reseñar este libro para tres medios diferentes incluyendo este blog. Tranquilos: la de aquí siempre será la reseña más extensa, más franca y desinhibida. Si tengo que decir que el autor es un capullo lo bastante arrogante para que parezca que ni tan siquiera se lee dos veces lo que publica, aquí lo haré. En otros medios, ya veremos.
Pero no es el caso: sólo había leído un libro de Javier Calvo; hace unos dieciocho meses debí decir algo así como que Mundo maravilloso era un libro que iba de más a menos, y que ese menos era un decepcionante final excesivamente deudor de recientes hitos del cine policíaco; con bandas rusas y todo el mundo apuntándose mutuamente con sus armas.
Esa sensación, la de no acabar de decantarme hasta ver como Javier Calvo resolvía la espiral narrativa, me atenazaba en esta nueva lectura a la vez que me empujaba a seguir. Así han volado las 359 páginas de esta novela, Premio Biblioteca Breve 2012 (breve? 359 páginas, breve?). Y así he constatado aquello que comenté hace montones de posts: la experiencia progresiva acaba beneficiando al narrador. Pues El jardín colgante es un brillante ejercicio de novela que conjuga aspectos policíacos, históricos, políticos, y hasta esotéricos. Inteligentemente ubicada en ese momento entre 1976 y 1978 en el cual se desencadenan cambios en las estructuras de poder en España: los servicios de inteligencia creados por el régimen franquista empiezan a enfrentarse a tesituras insospechadas. Es una historia de infiltrados, de grupos terroristas románticos e ingenuos (pero no tanto), de gente llamándose camarada, de funcionarios sórdidos y crueles. Con traiciones de ida y vuelta y planes maquiavélicos, en su concepción y en su ejecución. Calvo lo narra todo muy bien, evitando la confusión en que es fácil caer en este tipo de historias. Sitúa elementos temporales que ayudan al contexto; el revuelto panorama de los grupos terroristas europeos, en Italia, en Alemania. La explosión punk. Todo avanza y confluye, y esta vez el final no es el fallido de Mundo maravilloso. No diré más.
Leí numerosos elogios en la solapa del libro. Uno de ellos consideraba a Calvo un digno seguidor de un nutrido grupo de autores favoritos; Bolaño, Houellebecq, Palahniuk. Quizás exagerado: puede que me cueste pensar en estos términos de un autor tan cercano. Pero El jardín colgante es una novela muy bien escrita basada en conjeturas que pocos serían tan atrevidos en plantear. Calvo ha dado un poderoso paso adelante.
Francesc, no puedo creer lo pequeño que es el mundo: conozco a este tío. O sea, lo conozco en persona, es amigo de un amigo! Lo vi una vez en el Cículo de Bellas artes de Madrid, donde hizo una especie de performance espantosa. Bueno, está bien, espantosa para mí. Él contaba un cuento (gritó, lo gritó de principio a fin!) mientras otra gente le ponía música (entre ellos, mi amigo).
ResponEliminaNo te alcanza esta coincidencia? Hace unos 4 o 5 años (supongo que cuando el libro salió) le regalé a mi madre "Mundo maravilloso" porque me encantó la portada. El libro no le gustó, pero recuerdo perfectamente cuando se lo compré.
Ahora siento que debería leer algo suyo! Aunque la verdad es que el tío me pareció arrogante y desagradable... es masoquismo dadas las referencias?
Mira, creo que lo mejor que puedes hacer es ver su blog, que tengo en la lista aquí al lado. A veces es mejor no conocer demasiado a ciertos escritores: son gente raruna. Pero creo que hay que seguirlo algo de cerca: apunta maneras.
EliminaPues le echaré un vistazo y ya te contaré.
ResponEliminaClaro : en Berlín no debe ser muy sencillo conseguir algo suyo en español. Veré qué puedo hacer.
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