QUERIA COMPRARME UNA CAMISETA

Hace unos días que ha empezado, oficialmente, el otoño. Hace algo menos de calor, por tanto. Yo me resisto, aún este fin de semana, a abandonar mi uniforme, así que desde el viernes ando con mis sempiternas bermudas cargo. Como un crío regreso al pantalón corto a la que puedo. Luego dependiendo del calor más o menos intenso, polos o camisetas : no me afecta lo que puedan decir los estirados iconos de la elegancia : es Barcelona y en verano hace un calor del demonio. Este verano pensaba renovar un poquito mis desgastadas t-shirts. Primero pensé en tirar de clásicas marcas americanas, de éstas que el logo cada día es más grande ( TH y PRL ). Lo descarté pues empieza a parecerme una opción demasiado fácil, y me gustaría descartarme de un estereotipo tan pijo. Pensé, en una onda más europea, en G-Star Raw, pues hace unos años me compré algunas y me gusta ponérmelas : otro descarte : empieza a ser una marca un pelín arquetípica de cierto garrulo vestido de bonito ( ya sé que serán manías, pero a la que se me mete algo en la cabeza ). Luego pensé en Abercrombie... (volví tarumba a una amiga por una camiseta de A&F directly from NYC... para descubrir que puedes comprarlas tranquilamente por la web ) pero para una o dos camisetas los gastos de envío me parecieron excesivos. Hoy he visto a una chica declarando su condición de lesbiana en una camiseta ... tampoco es mi rollo ( además, qué pondría : Señoras, ante ustedes un hetero ?? ).Tras todo este proceso pensé que no me gustan esas sosas camisetas de tal o cual ejército o universidad, o club, o lo que sea que te etiqueta, por lo que decidí, en un ejercicio de sacar pecho, comprar una camiseta que reflejase algún gusto mío de esos que son incuestionables. The Wire o The Sopranos hubiese sido una opción, pero al final, cuando me decidí finalmente a cual era mi camiseta ideal : de color verde oliva ligeramente desgastado, con el logo clásico del sello Warp ( un icono de la música moderna, sin apenas tachaduras en su hoja de servicios ), me dí cuenta de que no existía, y de que, de tanto darle vueltas, el verano ya había pasado.